martes, 20 de enero de 2009

El verdadero sentido de la vida : Todos somos superhéroes generadores de información







(Ejem ,él volando y ella caminando por camino de tierra...En fin, la vida de la mujer es así.)







Del diario argentino " La Nación" del 9 de Julio de 1995:
"Acaba de morir en Francia el doctor Henri Laborit, pionero de la psicofarmacología. Se le debe el descubrimiento del primer tranquilizante, la clorpromazina (Largactil), que le valió el famoso premio Lasker.
Fue también un escritor fecundo, autor de unos quince libros que tratan de biología, medicina, psicología, química y física. Intervino exponiendo algunas de sus ideas en la película de Alain Resnais "Mi tío de América".
Muy interesada por la película y habiendo leído uno de sus libros, lo entrevisté hace unos años en París y luego, cuando vino a Buenos Aires.
Al releer esos reportajes me pareció oportuno recordar algunos de sus conceptos.
El inconsciente: está formado por lo adquirido. No existe lo innato. Tenemos sólo tres pulsiones instintivas fundamentales: comer, beber, copular. Todo el resto se aprende. Caminar, hablar, etc. Nada es innato. Somos lo que los otros nos enseñaron. Pero eso se vuelve inconsciente, porque está automatizado.
-¿Entonces el hombre está totalmente programado? ¿No hay libertad?-Sí, si usted llama libertad a la imaginación. Es lo que nos puede sacar del sistema maniqueo en el cual todo es blanco o negro. Lo que puede hacernos descubrir el gris es la imaginación. A pesar de que lo imaginario no está totalmente libre porque no es gratuito. Para imaginar se debe tener una experiencia para asociar diferentemente lo que ya ha aprendido. Y esa experiencia ha sido ella misma determinada por sus relaciones con el entorno anterior.

-Usted dice que la creación vence la muerte, ¿de qué manera?
-En un organismo vivo hay una estructura que no es ni masa ni energía, que reúne los elementos masivos energéticos, los átomos, las moléculas, etc. Finalmente lo que sale de ahí es un individuo que se prolonga en el tiempo. Ese individuo está hecho de informaciones que no pesan, que no son materia ni energía. La muerte va a destruir la materia y la energía y luego, por supuesto, porque no hay más materia ni energía, la información que reunía esa materia y esa energía vuelve al pool co¬mún de las materias orgánicas. Pero, mientras tanto, el individuo ha producido información: eso es específicamente humano. Tiene esa suerte.
Finalmente cada vida humana es información y deja huellas en el cerebro de los demás; participa, pues, en la evolución general del hombre sobre el planeta. Sólo que, si se llama Pasteur, Einstein, Galileo, Kepler, etc., dejan más información que otros, pero no por eso hay que reverenciarlos. Son hombres como los demás, cuyo determinismo hizo que fuesen situados en un momento del espacio-tiempo en que han sido más favorecidos que sus semejantes, en la manera en que han manejado la información que había sido introducida en su cerebro. Pero es una propiedad, un tesoro que pertenece a la especie, no está ligada con el individuo.
Hay que admirar a esos hombres por lo que han aportado , pero no divinizarlos, no hacer de ellos unos "gurúes", y creer que su verdad es definitiva y total."
¿ No es impresionante? ¡Dejamos huella en el cerebro de los demás solo por el hecho de vivir , y sin tirarle una sola piedra por la cabeza!

Así que ya lo sabes : cada uno de nosotros nace para dejar una impronta en los demás, colaborando con el crecimiento y la evolución de la especie. Esa es nuestra función , y cada vida colabora para que la especie resulte más eficaz.
Sabemos que a algunos les importa un rábano colaborar con el acerbo informativo de la especie, como yo, que ahora me voy a tomar sol con el mate , el termo , y una revista de chismes ...¿ O será que enterarme que esta diva de Hollywood se está por divorciar me sirve para colaborar con el acerbo informativo humano de saber con qué clase de tipo las mujeres no deberían casarse jamás?

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